La teoría del maridaje consiste en la unión de platos de sabor fuerte con un vino con cuerpo, y los platos ligeros con un vino de poco cuerpo. Pero, para conseguir un buen maridaje, hay que tener en cuenta que existen muchos y diferentes matices según qué alimento utilicemos para el maridaje.
El objetivo de cualquier maridaje es potenciar los sabores en la mayor medida posible. Pero con tantas combinaciones, resulta difícil establecer una receta estricta para combinar la comida con el vino. Y por supuesto, siempre hay que tener en cuenta el gusto el consumidor.
Maridaje y Vinos según qué alimentos
✔ Quesos
Un queso tierno y graso puedes combinarlo con un vino blanco con cuerpo o uno seco ligero. En cuanto al queso azul, un vino tinto ligero te ayudará a potenciar aún más el sabor. Sin embargo, un queso curado o muy curado, combinan a la pefección con un vino tinto potente.
✔ Ensaladas
No los combines con vinos dulces, elige un rosado o un blanco con aroma frutal.
✔ Paellas y Arroces
Un vino blanco ligero y seco con aroma frutal, pero que no sea excesivamente dulce. También se pueden combinar con un tinto ligero con aroma o un penedés.
✔ Mariscos
Cualquier vino blanco encaja con el marisco a la perfección, incluidos los dulces y florales.
✔ Carnes
La carne roja se puede combinar perfectamente con vinos maduros como riojas o riberas. En cambio, la carne blanca marida perfectamente con un vino blanco seco, pero nunca ácido. Las carnes frías maridan a la perfección con tintos ligeros y blancos secos.
Ahora ya conoces algunas combinaciones para conseguir un maridaje perfecto y potenciar al máximo los sabores de cada alimento. Aunque la decisión final está en el paladar de quien lo vaya a tomar. Cuando vayas a comer o cenar a un restaurante, consulta con el camarero qué vino maridará mejor con la comida elegida.
Reserva mesa en un buen restaurante este verano y disfruta de un excelente maridaje.
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